Proyecciones de José Guerrero

Proyecciones

Colours. Manuel Navarro. España (2013) 80´
Desde Granada con color: José Guerrero. Ático 7. España (1985) 6´
Guerrero pinta un cuadro (Día festivo). Alberto Portera. España (1968) 11´

Palacio de los Condes de Gabia
12 de noviembre de 2014. 20:00 h.
Organiza: Centro José Guerrero y Departamento de Artes Audiovisuales del Área de Cultura.

El cine reconstruye una cierta memoria y es necesaria para la cimentación de los mitos. También en el caso de José Guerrero del que, tal vez por su adscripción social, se guardan pocas imágenes de infancia y juventud. Pero, curiosamente, la historia proporciona otras en las que pinta y convierte el lienzo en trozos de real, intentos vanos de superar los límites: trampas para la mirada, cárceles del goce arrojadas sobre el lienzo como si fueran restos de su propia mirada.

Colours es una práctica documental dirigida por Manuel Navarro, en la que se revisa la obra y vida de José Guerrero a partir, sobre todo, de la brecha abierta por su estancia en Nueva York. Navarro hace un recorrido, a partir del autorretrato del pintor, desde su llegada a Nueva York con 35 años hasta sus orígenes en Granada. Esa mirada hacia atrás le permite vislumbrar la amalgama que el expresionismo abstracto y la Escuela de Nueva York formó con el barranco de Víznar, las lavanderas, los arcos o las gitanas preñadas de sus orígenes.

Las palabras de Muñoz Molina, Justo Navarro o María Corral van perfilando el contraste del ambiente que había en Granada, incluso en el resto de Europa, con el auge de la ciudad de los rascacielos.

Desde Granada con color. José Sánchez Montes entrevista a José Guerrero cuando ya estaba afincado en España y su obra había sido expuesta en Granada. En ese tiempo, no era extraño encontrar algunos grabados de José Guerrero en las paredes de profesionales y gente de la cultura, incluso algún lienzo en casas de la burguesía granadina. Resultan también curiosos los detalles de su estudio con la foto de su madre sobre la mesa o declaraciones sobre su firma a la espalda del lienzo o lo que hace todos los días al levantarse. Estos datos aportados en pocos segundos contrastan con las imágenes del pintor distendido y sonriente.

Día Festivo o Guerrero pinta un cuadro es paradigmático. En él se basan todos los trabajos que sobre Guerrero se han hecho en materia audiovisual. En cierto modo, es fundacional. Y lo es porque permite al espectador asistir al proceso manual de los bocetos. Los rojos, azules y negros contrastan con el color de la propia camisa que descaradamente compite con las pinturas surgidas de los botes. Los largos planos sobre el proceso se detienen después en el rostro y los gestos de Guerrero cuando su cuadro está acabado.