CARLOS LEÓN (Ceuta, 1948) forma parte de la generación de artistas que, desde los años setenta del pasado siglo, se interesó por los nuevos caminos de la abstracción pictórica y fue alcanzada por el efecto Guerrero. Son varios los aspectos (biográficos, de carácter, de actitud y poética, plásticos) en los que coinciden León y Guerrero a lo largo de sus respectivas trayectorias. Pero quizá se impone uno: el hecho de haber afrontado el impacto de los grandes pioneros del expresionismo abstracto sin sucumbir al peso de su legado formidable. Los dos artistas españoles cuentan con la necesaria solidez para imbuirse de la energía de ese movimiento vertiginoso sin ser fagocitados por él.

  • Fechas: Del 5 de octubre al 30 de diciembre de 2018
  • Lugar: Centro José Guerrero
  • Organiza: Centro José Guerrero-Diputación de Granada
  • Colabora: Ministerio de Cultura y Deporte