Muestra en gran medida inédita que explora la labor más experimental que el pintor llevó a cabo en unas fechas cruciales para la generación del expresionismo abstracto, los años sesenta y setenta, que supusieron en muy buena medida la dramática liquidación del universo simbólico y estético que habían puesto en pie. Guerrero fue una de las pocas voces que encontró vías de salida a la pintura de la que él era heredero tras el impacto del pop. Muchas de sus tentativas (destacan los collages que hacían uso de elementos cotidianos como bolsas de papel, librillos de cerillas o recortes de papel de distintas texturas) no han salido nunca de su estudio, entre otras razones por el carácter de ensayo que les atribuía.

  • Fechas: 10 de julio al 5 de octubre de 2003
  • Lugar: Centro José Guerrero
  • Organiza: Centro José Guerrero